Cómo reconocer a un maltratador
Aunque el maltratador se vista de seda…
Desgraciado maltratador se queda.
Y no habría mucho más que añadir.
Porque lo cierto es que estos individuos no llevan un cartel de neón en la frente.
Son personas «normales», vistas a distancia. Incluso de cerca, pueden ser verdaderos «encantadores».
¿Entonces cómo saber cómo son en realidad?
Algunos maltratadores van acumulando relaciones tóxicas precisamente porque van embaucando a una tras otra de sus víctimas. Según estas van dándose cuenta del tipo de elemento que es en realidad, si rompen con él, a pesar del número dramático que montará intentando que creas que no puede vivir sin ti y que incluso piensa en quitarse la vida, lo cierto es que estos seres solo se quieren a sí mismos, así que no, no lo hará. No solo no se va a suicidar ni va a morirse de pena, sino que si de verdad cortas todos los lazos con él, buscará otra. Y no tardará en hallarla. Porque en realidad lo que buscan es un recipiente de sus obsesiones y sus fantasías enfermizas. Da igual cómo seas. Lo que le interesa es conquistarte, tenerte y controlarte. Son psicópatas buscando hacer realidad sus fantasías. No te engañes, no te quiere. Son incapaces de albergar amor porque no entienden ese concepto de aceptación, respeto y tolerancia necesarios para amar.
¿Por qué tienen éxito?
Un maltratador es un experto en halagar, en piropear exactamente del modo que a ti más te guste: será romántico y detallista como el que más, desprendido en regalarte cosas que de verdad tengan un significado especia para ti. Creerás con esto que te escucha hasta el mínimo detalle para saber qué te gusta, cuando en realidad lo que hace es espiarte y estudiarte como en un juego de estrategia. Recuerda que para él eres un objetivo.
Cumplirá tus deseos y sueños (hasta los más oscuros si es que has cometido la imprudencia de compartirlos con él), se esforzará mucho en que todo el mundo sepa que estás con él.
Porque para él eres un trofeo.
Le importas realmente NADA.
Pero eres su objetivo, su meta y lo que le genera placer es controlarte y tenerte… y por supuesto exhibirte.
Eso sí, no tolerará que te exhibas tú.
Este tipo de maltratadores psicológicos suelen ser extremadamente moralistas. Aunque por otro lado, tras esa apariencia de reputación intachable, se esconde un depravado. Te sorprendería cómo pueden ofenderse porque consideran inmoral que quieras tener una relación esporádica con él si ser su «prometida» , o que publiques fotos para él «vergonzosas», pero luego te mande fotos que avergonzarían a la mayoría de tus contactos. O te pidan ir al límite o más allá de lo «aceptable» en el sexo. Así son.
Tras esa fachada de beatitud y moralidad solo hay un ser oscuro y podrido.
El problema de estos maltratadores es que confunden su fantasía de control y sumisión con la vida real. Y creen que la mujer que desean es suya, así con todas las letras: su posesión. Y entonces todo ese «amor», que no es sino obsesión, se transforma en odio visceral. Y entonces es cuando sacan lo que de verdad son:
Seres despreciables y malignos que destilan odio por ti, por tu entorno y/o por todo lo que hagas.
Te odiará porque no te tiene, y odiará todo lo que eres y representas. Y toda la energía que dedicó a «adularte» ahora la enfocará a criticarte, a denigrarte y a hundirte (bueno, a intentarlo, porque realmente no tienen poder sobre ti).
Usarán tus secretos y confidencias para hacerte daño. Aquello que un día le confiaste en intimidad se convertirá en sus manos en un arma con la que apuñalarte. No tengas miedo. Nada hay peor que estar con un ser así de repulsivo, así que, haga lo que haga, diga lo que diga, es para bien si está lejos de ti.
Cuando empieces a ver cómo es y le digas «NO» a alguno de sus intentos por controlarte empezarás a ver su verdadero rostro. Violencia en forma de chantaje emocional o chantaje directo. Adjetivos con los que pretende denigrarte: zorra, puta, inmoral, poco profesional… Y todo esto mientras sigue jurando que te ama. Totalmente esquizofrénico para cualquiera menos para él, que ve normal decirte en la misma frase: «Eres una puta, eres despreciable y te amo»
Cuando de verdad vea que no consigue retenerte su odio crecerá e irá más allá que increparte a ti por privado. Lo hará de forma pública. Alguno hasta se convertirá en experto en hablar contra ti o contra tu trabajo. Igual hasta va a la Tv o da conferencias en un intento patético de seguir vinculado a ti.
Recuerda:
Lo que se hace movido por el odio, es odioso, como él, como ellos.
Y creerá que te hace daño, cuando ese comportamiento es autodestructivo para sí mismo.
Y con el tiempo estará con otra, y la exhibirá como suya. Seguramente con un lenguaje verbal y corporal que delaten ese afán de posesión.
Y tú pensarás:
-«Pobrecilla. Ojalá se dé cuenta pronto de cómo es de verdad, antes de que le haga más daño».
Y mientras, seguirá con su vida y su deseo de aparentar cualidades que en el fondo no tiene: profesionalidad, bondad, éxito…
En el fondo todos los maltratadores narcisistas son seres acomplejados.
No saben querer porque nadie los quiere,
así que necesitan encontrar reconocimiento de algún modo.
Intentarán hacer cosas «vistosas» y muy mediáticas para tener un auditorio que le aplauda. Seguramente les veas haciendo «obras de caridad», tipo banco de alimentos o similares. Da igual. Da igual lo que hagan, cómo se vistan, cuántos cargos acumulen, o cuántas conferencias den…
Porque nosotras sabemos lo que son, sabemos cómo son y sabemos lo que hacen.
Y sabemos que por mucho que adornen su CV son lo que son:
Maltratadores y Psicópatas en potencia
Y hablo con conocimiento de causa, porque yo he estado con uno. Y querida amiga, tú que sonríes en esa foto como sonreí yo un día, ojalá te des cuenta pronto de la verdad, ojalá alguien te avise de eso que aún no ves y salgas corriendo de ahí. Ojalá.